martes, 22 de julio de 2014

Escapar de la enfermedad, un sueño que tod@s anhelamos.

Escapar de la enfermedad, recuperar la salud, aprender a conservarla como lo que es; un precioso regalo...es un sueño que tod@s anhelamos.

Nuestros antepasados lo sabían, la naturaleza atesora grandes recursos que nos permiten recuperar y conservar la salud perdida.
Una incalculable gama de plantas, el sol, el agua, y nuestras propias manos, son la base de las medicinas alternativas.


Pero hemos sido programados para pensar que la salud solo está en manos de quienes han estudiado para ello.

¿Qué ha ocurrido con esas recetas sencillas que elaboraban nuestras abuelas con plantas y que tan bien nos funcionaban? Frotaciones con alcohol de romero, era el sustituto del paracetamol actual.

Retomar antiguos hábitos curativos, puede ser la salvación de una sociedad moderna profundamente enferma.

Observa a la gente cómo camina por la calle, cuerpos encorvados con cabezas adelantadas en relación al resto del cuerpo, una forma de caminar y moverse desgarbada o excesivamente rígida. 
Escucha las conversaciones, ¿cuántas no tratan sobre enfermedades? 
Piensa en la cantidad de horas que pasan muchas personas a la semana, entre médicos y farmacias.
¿Y qué hacemos en nuestro tiempo libre? Quedamos con los amig@s para beber y comer.

¿Crees que ésta es una forma de vida sana?

Lo bueno es que siempre podemos cambiar y dirigir nuestra vida de otra manera. 

Existen cientos de métodos y terapias naturales no agresivas con el organismo, que te ayudarán a recuperar la salud perdida. Pero lo que debes tener en cuenta es que tu salud no está en manos de otras personas, tu salud solo depende de ti.
Los demás podemos ayudarte a restablecerla, pero solo tú puedes mantenerla.

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